Muchas personas que sufren dermatitis seborreica llegan con esta consulta a nuestra clínica de Implante capilar. La respuesta es simple y la dermatitis seborreica no causa caída del pelo.
¿Qué es la dermatitis seborreica?
Es una enfermedad de la piel que no afecta directamente a la caída del cabello a medio y largo plazo. La vinculación entre la dermatitis y la caída del pelo que en ocasiones establecen los pacientes no quiere decir que se padezca de pérdida del pelo, sino que la dermatitis tiene que ser tratada.
De qué forma diferenciar la dermatitis de la alopecia
La dermatitis seborreica es una enfermedad inflamatoria crónica caracterizada por la aparición de zonas inflamadas en el cuero cabelludo. Frecuentemente genera picor y descamación. Los pacientes lo suelen percibir primero como la aparición de caspa, debido a la formación de escamas en la piel. Puede manifestarse asimismo en otras zonas del cuerpo con mayor presencia de glándula sebáceas, como los laterales de la nariz, las cejas, las orejas o bien el pecho.
En los adultos es más frecuente en hombres que en mujeres y se relaciona con cuadros de agobio, cambios de estaciones (frías y secas) y alteraciones del sistema inmune. Igualmente, se trata de una patología con un fuerte componente hereditario.
Por otra parte, la alopecia no genera caspa ni irritación en la piel en zonas del cuero cabelludo.
Tratamiento para la dermatitis seborreica
Si notas un volumen de caspa excesivo y empiezas a sentir irritadas ciertas zonas del cuero cabelludo, debes asistir al dermatólogo, quien podrá efectuar el mejor diagnóstico y recomendar el tratamiento más conveniente para la dermatitis seborreica. Así como la prescripción de los fármacos necesarios, normalmente de uso tópico o champús medicinales.
Hay una serie de medidas generales higiénicas, como evitar las duchas con agua muy caliente, los ambientes con calefacciones centrales o aire acondicionado o las situaciones de mayor estrés emocional o fatiga. Para la higiene diaria deben de utilizarse jabones neutros hidratantes y cremas y/o lociones hidratantes no grasas.
El tratamiento local varía en función de la afectación.
Para las formas del cuero cabelludo, se indica champús sulfonados suaves con ciclopiroxolamina, con o sin ácido salicílico al 2%. A veces, los champús con ketoconazol al 1% son útiles. Para las lesiones de región facial, las cremas de ketoconazol al 1% o soluciones con succinato de litio.
Los glucocorticoides de baja potencia, utilizados únicamente los primeros días, son útiles. También pueden serlo con moderación los nuevos inhibidores de la calcineurina.
En casos más severos, se pueden utilizar tratamientos sistémicos como tetraciclinas que disminuyen la secreción sebácea.
Recomendaciones
- Mantener una higiene conveniente del cuero capilar y el cabello.
- Adquirir un shampoo para cuero capilar sensible.
- Evitar la sudoración excesiva durante el tiempo que dure el brote.
- Evitar el impacto directo del sol y situaciones de frío y calor extremos que pueden dañar a piel.
Cumpliendo con el tratamiento veremos que poquito a poco, en un plazo de entre diez y quince días, los síntomas de la dermatitis seborreica reducen y desaparecen.
El aspecto negativo es que la dermatitis es una enfermedad que se manifiesta en forma de brotes. Es decir, sus síntomas pueden reaparecer ante factores externos, como un momento de mucho agobio.
¿Y si la pérdida del pelo continúa?
En el caso de probar una mayor pérdida de pelo, pese a que los síntomas de la dermatitis mejoren, debemos identificar las causas de esta posible caída del cabello alén de la enfermedad cutánea. Entre los principales motivos de la caída del cabello se hallan la herencia genética, las enfermedades autoinmunes, en ocasiones más difíciles de diagnosticar, y otras patologías del cuero capilar.
En la mayoría de los casos se trata de una alopecia androgenética, el tipo más habitual de pérdida de pelo. Esta alopecia afecta en mayor medida a los hombres y se presenta en áreas concretas de la cabeza, como las entradas, la zona frontal, la parte superior o la coronilla.
Tras el diagnóstico, y una vez confirmado el origen de la caída del pelo, los especialistas pueden recomendar la realización de un tratamiento médico y posiblemente un injerto pilífero para repoblar las áreas no recuperables. Conforme las peculiaridades y necesidades de cada paciente podemos aplicar técnica FUE, de extracción una a una de las unidades foliculares, o bien técnica FUSS donde se corta una mínima extensión de cuero cabelludo. El equipo especializado en tratamientos para la caída del pelo recomendará el procedimiento más conveniente en todos y cada caso.